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miércoles, 9 de octubre de 2013

La formación con cabeza.



A las puertas de que se publique la oferta formativa de Lanbide, he decidido abarcar el tema de la formación, un área imprescindible, pero no a cualquier costa.

En el momento en el que se publiquen todos los cursos subvencionados, e impartidos por diferentes centros, como es lógico y de esperar habrá avalancha. 

La situación actual, la espera a que llegue la oferta formativa subvencionada, la necesidad de estar activos hasta que salga nuestra oportunidad laboral, y el aumento de competencia hasta para realizar un curso, hace que muchas veces nos apuntemos a todo.

Sabemos que nos tenemos que formar, y reciclar continuamente. Se acabaron aquellos tiempos de una única formación y una única profesión para toda la vida, incluso una única empresa en el currículum.

Ahora debemos reciclarnos continuamente, la sociedad va cambiando y debemos de ir adaptándonos. Pero  ojo, eso no quiere decir que tengamos que hacer de todo,  saber de todo…. Si que debemos tener conocimientos generales amplios, porque cada vez se nos exige más, pero sin perder de vista nuestra especialización; la formación por que sí, no.

En Aldalan vemos mucha gente que tienen muchísima formación, pero sin una organización hacia una meta, un poco de aquí, un poco de allí…. Y ahí vienen las equivocaciones.

Y no debemos de olvidar que la formación, puede ser subvencionada, pero supone una inversión: tiempo, esfuerzo, dejar otras acciones, dinero – viajes…. 

Por ello una vez más insisto: ¿A dónde voy?, ¿Cuál es mi meta?, ¿Cuales son mis objetivos o posibilidades profesionales?, ¿Qué ofertas de trabajo hay y qué me falta para alcanzarlas?...

Hay que responder a estas preguntas si queremos escoger una formación que sea válida para nuestro currículum, y por lo tanto que aumente nuestra empleabilidad.

Esto no quiere decir , que habrá personas que tengan que “desvincularse” al seleccionar la formación, de su perfil, porque no hay demanda en su profesión. Desvincularse lo pongo entre comillas porque aunque tengamos que redirigir nuestro perfil, para adaptarnos a las demandas, debemos de hacerlo basándonos en las competencias que tenemos, y ajustar la nueva elección a estas. 

Todos sabemos la importancia que tiene una buena orientación laboral, también hemos de ser conscientes que una orientación formativa, para no dar pasos en falso, y luego crear frustraciones… también es imprescindible.

Por todo ello valora bien la formación que vas a seleccionar, para prolongar tu currículum y conseguir esa inserción que buscas. Porque no hay que perder de vista que nos formamos para trabajar, Y para progresar profesionalmente.

 Llevamos una mochila y en esa mochila tenemos que introducir las herramientas necesarias para construir nuestro camino, nuestro camino al empleo, y no cargarnos con herramientas que sólo nos sirven para que esa mochila pese más.

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