“Ser elegantes en la aceptación de la derrota”.

Laura Díez nos va a hablar de la psicología aplicada al deporte, una de sus pasiones, que nos dará pie al finalizar sus palabras, a utilizar sus consejos apara la búsqueda de empleo.

 

Una de las ventajas que tiene la carrera profesional de un/a psicólogo/a es que nos permite desarrollarnos en varias vías diferentes.

Una de las que más me apasiona es la psicología deportiva, en mi caso está orientada actualmente al motor con un piloto de velocidad. Por eso me ha parecido interesante daros unas pequeñas pinceladas de algo que se trabaja mucho en deporte pero que es útil para la vida que es, saber perder.

Lo primero de todo es que significa saber perder y una definición que a mi me gusta mucho es “ser elegantes en la aceptación de la derrota”.

Una persona en el ámbito que sea (laboral, deportivo, académico) no consigue el éxito a la primera, a veces sobrevaloramos el éxito y tendemos a ver el fracaso como algo negativo cuando de las derrotas se aprende mucho.

En gran medida depende de nuestra actitud y las actitudes también se pueden entrenar, en el deporte tratamos de trabajar el locus de control interno, que es tan sencillo como buscar la respuesta en nuestro propio comportamiento y preguntarnos qué haríamos de manera diferente si viviéramos la misma situación. 

Lógicamente no todo depende de nosotros, en la competición hay factores que no podemos controlar, como son los rivales, hay que asumir que hay días en los que otros son mejores, que han hecho una carrera mejor, que su moto iba más rápida…aceptarlo es parte del juego.

Un consejo que yo suelo dar para los padres con hijos que practican algún deporte es que hay que tener cuidado con los comentarios que pueden oír los niños, el objetivo debe ser jugar y los comentarios les afectan tanto para bien como para mal, con esto quiero decir que un niño que escucha frases de menosprecio al rival, insultos y palabras fuera de lugar de boca de quien para ellos son sus referentes que son sus padres, va quedándose con todo y normalizando esos comportamientos que pueden reproducir en cualquier momento, con lo cual no estaríamos fomentando esa actitud elegante de la que hablábamos al principio.

Saber perder no es en ningún caso dejar de expresar las emociones que sentimos cuando competimos al nivel que sea, por ejemplo, sentir enfado es muy normal cuando uno pierde y más cuando a veces una derrota en un deporte de élite tiene una consecuencia como puede ser perder un campeonato para el que llevan entrenando todo un año. No se trata de que no se enfade nunca, hay que entender el enfado, saber que viene por tener una serie de valores que han ido aprendiendo desde pequeños y de los que tiene que estar orgulloso.

Y por último os hablo de un concepto que para mi es mi favorito, es la ambición positiva que es tan simple como las ganas de superarse uno mismo sin que eso suponga no ser ético o pisar a los demás, es esforzarse en aquellos que nos hace ser mejores.

Espero haberos acercado un poquito más nuestra profesión y conozcáis mejor cual es la labor de una psicóloga deportiva que es básicamente dar confianza y seguridad al deportista para sacar la mejor versión de él mismo.

Laura Díez

Este tema nos viene muy bien también para la búsqueda de empleo. Hoy en día nos encontramos con constantes no; No me llaman para la entrevista, No han aceptado mi candidatura, No me responden... y a pesar de los Nos y del tiempo que duran, porque es un camino largo, la inserción laboral, en muchos casos, hay que seguir, hay que ser perseverantes. Y en ese camino ir haciendo una evaluación de lo que se está haciendo bien y hacer incapié y lo que se esta haciendo mal y corregirlo o susituirlo por otras acciones.

A veces también es necesario tener un "mecánico", un "equipo", de profesionales que te ayude a mejorar y a llegar a cumplir tu objetivo. 

Al igual que en el deporte en nuestra búsqueda de empleo, también hay una meta, y tiene que estar clara y definida. No nos imaginamos un carrera de coches sin una meta, pues yo no concibo tampo una búsqueda de trabajo sin una meta.

También tiene que haber un un punto de salida, y saber tu cuál es, reconocerlo, tu perfil , tus competencias... y conocer también a tu competencia, porque en tu carrera por el empleo, te encontrarás con contringantes, y cuanto más conozcas su preparación y sus puntos débiles, más opciones de ganar.