Nuestra compañera Laura Fernández vuelve a redactar un post para nuestro blog. Laura está realizando una investigación en el campo de competencias profesionales, y en esta ocasión nos habla de las 3 competencias imprescindibles para realizar una búsqueda de empleo eficaz.
yo llevo más de 13 años dedicada a la orientación y búsqueda de empleo y efectivamente corroboro la información que aporta, ya que lo vemos en el día a día. Las personas que emplean estas 3 competencias son altamente eficaces para encontrar un empleo, para crecer en este y para desarrollarse plenamente en cualquier área de su vida.
Hoy en día, prácticamente ninguna persona permanece en la
misma empresa y en el mismo puesto de trabajo durante toda su vida laboral. Hace unos años era frecuente encontrarse con candidatos que habían estado durante un tiempo prolongado, varios años en una misma empresa, ahora no. En la actualidad los ceses de contratos, cambios laborales son cada vez más frecuente, esto significa que hay que estar preparados para buscar empleo, activos, y prospectado de manera continua el mercado laboral.
En la búsqueda de empleo, al igual que en otros procesos de
nuestra vida, las emociones tienen un papel determinante, las cuales pueden ser
gestionadas y dirigidas correctamente mediante la inteligencia emocional. El papel de las emociones en momentos de crisis tiene un mayor peso, y su gestión eficaz es necesaria para un correcto funcionamiento en todas las parcelas de nuestra vida.
Para
ver cómo nos puede ayudar la inteligencia emocional en esta búsqueda, voy a
centrarme en tres competencias personales directamente relacionadas con ella:
el autoconocimiento, la autorregulación y la motivación.
El primer paso antes de comenzar con la búsqueda de empleo
sería la realización de una evaluación basada en el auto-conocimiento. Consiste
en una introspección que va a permitir conocer nuestro estado interno y en base
a ello, hacia dónde enfocar la estrategia y los objetivos profesionales. Existen
diferentes test de auto-evaluación que facilitan el auto-conocimiento, como los test
de competencias profesionales o de conducta emocional. También se puede
recurrir a profesionales en orientación laboral.
Una vez fijada la estrategia y los objetivos profesionales,
es el momento de comenzar con la búsqueda de oportunidades laborales y el
contacto con las empresas que pueden interesarnos. En esto es especialmente
importante la motivación y la autorregulación emocional.
La motivación es el impulso que dirige las acciones hacia una
meta, en este caso, la meta profesional. Las acciones a llevar a cabo son
diseño y actualización del currículum, preparación de cartas de presentación, búsqueda
de ofertas en webs y portales de empleo, el envío de nuestro currículum a
empresas, entrenamiento para las entrevistas, etc. Todo ello de manera
organizada y planificada para que aporte los mejores resultados.
Generalmente, la búsqueda de empleo suele llevar su tiempo y
hay que tener presente que surgirán dificultades en el camino. La autorregulación
es la competencia que permite el dominio de los estados internos; por eso, esta
competencia permitirá que no nos detengamos ante las dificultades que puedan
surgir.
Estas competencias mencionadas y otras, se pueden desarrollar
progresivamente, aportándonos muchas ventajas a la hora de buscar empleo.
Cuantos más recursos emocionales consigan mejorarse durante la búsqueda, que
puede verse como una oportunidad para centrarse en ello, se notará a la hora de
mantener contacto con la empresa y de acudir a la entrevista.
Las posibilidades de
contratación aumentarán y parecerá que tenemos más posibilidades, efectivamente
es así porque hemos conseguido cambiar nuestro punto de vista y nuestra
actitud. ¡El esfuerzo dará sus resultados!
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