CROWDSOURCING. Cuando la solución está fuera.

Repetimos uno de los post con más audiencia
 
El término Crowdsourcing es la unión de crowd (masa) y outsourcing (externalización) y esta nueva técnica se basa en buscar fuera de nuestros colaboradores y empleados.

Una ayuda para la solución de los problemas que nos puedan surgir, es decir, externalizar unas tareas que habitualmente realizaban nuestros trabajadores pero que, por un motivo u otro, se opta por contratar a otras personas externas para realizar este trabajo.




A primera vista puede que no resulte muy original ya que lo que los directivos de las empresas hacen es abrir una convocatoria o un puesto de trabajo para un fin determinado y contratar a las personas más aptas.

Hasta aquí todo normal pero lo destacable de todo ello es que con la llegada de las nuevas tecnologías, como las Web 2.0 o los famosos smartphones es mucho más sencillo optar por este recurso.

Especialmente en algunas empresas que tienen que estar continuamente informados como ocurre en el área del periodismo, publicidad o marketing, entre otras.

Curiosamente, en una entrevista a Andrea Grover, uno de los gurús del crowdsourcing le preguntaron si los colaboradores se “reprimían” más por Internet al escribir sus noticias o creaciones en los publicistas, que trabajando cara a cara con el jefe a lo que él respondió que no. Que los trabajadores veían Internet como una vía de libertad de expresión más si cabe que en la redacción.

Originalmente, el crowdsourcing fue diseñado para que las empresas pudiesen ser rentables y redujesen gastos y está siendo uno de los referentes en el nuevo mundo 2.0.

Pero como todo, también tiene sus detractores o sus inconvenientes. Las políticas de confidencialidad quedan a un lado ya que no hay términos formales que avalen a los empleados, tienen dificultades para trabajar unos con otros…

Pero otras empresas también han pensado en esto último ya que Amazon.com propuso en uno de sus últimos proyectos conseguir reforzar a las empresas y colaboradores promoviendo una cercanía con el fin de que estos no sintieran que estaban solos y que, a pesar de tener un trabajo mayormente individual, eran un equipo.

¿Quién no conoce a alguien con talento artístico? Personas que dibujan o pintan de forma espectacular pero que, por motivos de dinero, no han podido costearse una carrera como tal?

Pensamos que el crowdsourcing puede ser una buena vía de escape para darse a conocer, quizá al principio tengan que empezar como voluntarios enviando sus obras a empresas interesadas pero ¿quién sabe si dentro de unos años no tenemos a un nuevo talento creativo?

Sin duda alguna, si antes podíamos estar informados casi al instante por la era de periódicos digitales, ahora no habrá ningún problema para tener twitterperiodistas o twitterpublicistas al alcance de nuestra mano.