El poder del silencio

De camino hacia el trabajo venía leyendo un libro que menciona el poder de la palabra, y yo me he acordado del poder del silencio (lo contrario), porque considero que tiene más fuerza y mueve más emociones que la palabra.

Entonces me he acordado, de un profesor que tuve en el Máster que realice en Madrid, de Recursos Humanos que nos hablo del silencio desde el silencio. Os pongo en situación cuando el Máster ya estaba avanzado no había quien nos callase, unos con otros... sobre todo los lunes contándonos lo realizado el fin de semana, porque el máster se realizaba en Madrid y normalmente el fin de semana volvíamos a nuestra localidad, la tierra de uno tira... Los profesores chillaban... pero no conseguían callarnos o su resultado duraba poco tiempo.

Hasta que un día uno dio con la solución. Entro en el aula en silencio se sentó y no dijo nada, lo único que hizo fue mirarnos poco a poco a toda la clase. No tardamos 30 segundos en callarnos todos, silencio absoluto, ni el 1º día cuando aún no nos conocíamos hubo tal silencio. Después de esos 30 segundos dijo "Hoy os voy a hablar del poder del silencio".

Yo hasta ese día no lo había contemplado pero con su ejemplo, con su clase y con las vivencias posteriores lo he podido contemplar, la fuerza que tiene y la incomodidad que genera. Y sino prueba de ello es que cuando estas con una persona que no conoces necesitas romper los silencios y hablar aunque sea de temas comunes, el tiempo, lo que acaba de suceder... ya cuanta más relación haya el silencio incomoda menos. La típica situación es la del ascensor, y te encuentras con un vecino que apenas conoces...

Hoy quería compartir con vosotros la importancia y el poder del silencio, algo de lo que apenas se habla y sin embargo se vivencia.